El tiempo deja huella en los materiales. Fade fusiona el cemento con texturas pétreas, envejecidas
y gastadas por el uso, pero que nos trasladan a recuerdos y a la melancolía del ayer.
El desgaste se hace patente en las huellas y la erosión de su superficie. Los arreglos artesanos,
realizados con el paso de los años, se fusionan con tonalidades neutras y en tendencia, creando
ambientes vanguardistas sin perder la esencia del pasado.
Además de los tres colores naturales Crema, Piedra y Plomo, Fade incorpora un decorado
hidráulico monocromo de aspecto desgastado.
Presentado en Cevisama 2015